La retina es una zona sensible a la luz que tapiza la cara interna y posterior del ojo. Su función es similar a la de una película fotográfica sobre la cual son proyectadas las imágenes que capta el ojo para luego ser llevadas al cerebro a través del nervio óptico. En el centro de la retina existe un área especializada en la visión de detalles y colores llamada mácula, la que hace posible que podamos leer, ver televisión o reconocer las caras. El cuerpo vítreo es una sustancia gelatinosa transparente que llena el ojo en su parte posterior, entre la retina y el cristalino. Cuando el cuerpo vítreo deja de ser transparente la luz que entra al ojo no puede llegar hasta la retina y entonces se afecta la visión.